En economía, la definición de la palabra oferta se entiende como la cantidad total de un determinado bien, producto o servicio que un determinado proveedor ofrece a los consumidores de un determinado lugar, en un período concreto de tiempo, y a un determinado nivel de precios. La oferta suele estar determinada por los movimientos del mercado. Es decir, los crecimientos en la demanda, pueden hacer que los proveedores decidan aumentar la oferta de un determinado bien o servicio.
Si hablamos en términos ideales, la oferta y la demanda deberían de ser iguales, es decir, que existiese la capacidad de cubrir toda la demanda de un determinado bien o servicio con la oferta existente. Suponiendo que todos los factores son constantes, según la ley de la oferta, el aumento de la demanda de un determinado producto, proporciona al proveedor de dicho producto, una indicación positiva para aumentar sus suministros y elevar con ello el nivel de oferta en el mercado. Estas circunstancias podrían llevar a un aumento de los precios.
Algunos de los factores que pueden afectar al comportamiento de la oferta y la demanda son, por ejemplo, los cambios en los costes de fabricación, las características y preferencias de los consumidores, las intervenciones estatales y los subsidios del gobierno y el clima extremo.
Sin lugar a dudas, hablar de oferta en economía requiere que entiendas el concepto de demanda. La demanda representa la disposición de los consumidores de comprar un determinado producto, bien o servicio.
Estos dos componentes (Demanda y Oferta) están completamente interrelacionados, y por tanto se afectan uno al otro. Son igualmente imprescindibles para entender cómo funciona la economía, ya que juegan un papel determinante en los cambios de precios en bienes y servicios, la cantidad de bienes consumidos y la cantidad de bienes producidos.
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