El mutualismo es una forma de simbiosis animal en la que dos especies diferentes se benefician mutuamente al interactuar entre sí.
En esta relación simbiótica, ambas especies obtienen ventajas y cooperan para su supervivencia y éxito.
Cada organismo proporciona algo que el otro necesita, como alimento, protección o servicios de limpieza. Es un ejemplo de colaboración en la naturaleza, donde ambas partes se ayudan y se fortalecen mutuamente.
Un ejemplo de mutualismo es la relación entre las abejas y las flores, que explicaremos a continuación:
Las abejas se alimentan del néctar de las flores y, al hacerlo, transportan polen de una flor a otra, favoreciendo así la polinización y reproducción de las plantas.
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